Cuesta de enero…¿cuesta del estrés?
Como cada comienzo de año, existen una serie de factores que pone cuesta arriba el ánimo durante las primeras semanas de este mes. Y es que la cuesta de Enero es, para algunas personas, más dura que para otras por diversos factores.
En Co&Co Training sabemos que seis de cada diez personas padecen los efectos de este inicio de año. Y es que la economía y los propósitos generan ciertas obligaciones que suelen provocar estrés.
Pero, ¿qué cosas estresan más en la cuesta de Enero?
1.- El presupuesto del hogar. Después de varias semanas de gastos en comidas familiares, regalos e invitaciones, muchos hogares se han endeudado con aplazamientos. Han financiado los gastos y comienzan a pagar a finales de mes. El gasto por encima de las posibilidades con el fin de satisfacer a niños y adultos en regalos y atenciones puede jugar malas pasadas. Esto acaba siendo un motivo de preocupación porque las cifras de la economía del hogar no cuadren.
2.- Las rebajas. Muchos españoles se imponen como meta la compra de determinados productos en las rebajas. No tienen en consideración los gastos previos de la Navidad. Las necesidades que se crean por comprar productos muy rebajados, a veces sin necesitarlos, pueden llevar a un gasto incontrolado. Todo por encontrar el mejor ‘chollo’. El estrés en la búsqueda de ese producto unido al que se puede crear cuando el análisis de las cuentas no cuadre provoca situaciones de verdadera ansiedad.
3.- Las subidas de precio de los suministros del hogar. La subida de precios en carburantes, electricidad, telefonía, calefacción y otros van sumando piedrecitas a la mochila del presupuesto en el hogar. Analizar los gastos y ver cómo crecen los importes de las facturas supone un motivo más de agobio. Y más teniendo en cuenta que estamos pagando la luz más cara de la última década.
No todo tiene que ver con el hogar en la cuesta de enero
4.- Las dietas. Es costumbre fijarse un objetivo o propósito de año nuevo, pero siempre que sean metas alcanzables y con un período de ejecución a largo plazo. La ansiedad que muchas personas muestran por perder peso. lo quieren hacer rápidamente con efectos visibles desde las primeras semanas. Todo ello genera un estrés del que no son conscientes en un objetivo que debe ser a largo plazo.
5.- Dejar de fumar. Si a una dieta, los quebraderos de cabeza con la economía del hogar, las subidas de precio y las rebajas le sumamos esta meta para muchos se convierte todo en una odisea. La ansiedad que el tabaco genera a los fumadores que quieren dejarlo es un acicate más para la presencia del estrés.
En Co&Co Training aconsejamos un análisis de la situación y anticiparse a los gastos derivados de la economía. Una buena planificación ayudará a que la improvisación no sea aliada del estrés. También fijarse objetivos y metas realistas en un plazo razonable ayuda a mentalizarse y no autoimponerse resultados cortoplacistas. Estos llevan a la decepción y a la ansiedad.
Y, finalmente, para los momentos en los que se produzcan problemas físicos asociados al estrés es recomendable ejercitar la respiración tratado de que ésta sea abdominal con una frecuencia razonable de entre 8 y 10 veces por minuto.