Organizar el trabajo y reducir el estrés

En muchas ocasiones a nivel laboral tenemos la mente llena de ideas y muchas cosas que hacer, algo que nos impide avanzar y organizar el trabajo se convierte en la clave para reducir el estrés.

Cuando se tiene la mente llena y tareas pendientes se produce una bajada de productividad. Nos volvemos menos creativos y tenemos una mayor dificultad para poner la atención en una única tarea. Normalmente sufrimos el estrés porque no cumplimos con los previsto por no tener las tareas bien organizadas.

La capacidad de saber cómo organizarse en el trabajo es una de las claves del éxito para superar este problema y sacar así tiempo para poder ejecutar todas las actividades.

En este sentido tenemos varias opciones:

  • Cumplir las tareas que nos motivan
  • No ejecutar esas tareas
  • Negociar las tareas
  • Delegar esas tareas

¿Cómo organizarnos de forma eficiente?

Para organizar el trabajo en pos de reducir ese estrés podemos hacer varias cosas, algunas de ellas os las hemos comentado en otro post:

  1. Elaborando listas se pueden repartir a lo largo de la agenda semanal y si alguna de ellas es una tarea muy grande, parcelarlas puede ayudar mucho.
  2. Un registro del tiempo que lleva cada una puede ser interesante de cara al futuro con tareas similares.
  3. Priorizar con ellas es algo esencial, como ya indicamos en la matriz de prioridades para tareas urgentes e importantes.
  4. Tareas pequeñas, de poco tiempo de duración, intenta no aplazarlas.
  5. Es muy importante guardar un descanso cada dos horas de trabajo.
  6. No empieces con una tarea hasta que no hayas terminado la otra. La flexibilización puede ser también un buen aliado contra el estrés.
  7. No improvisar, puesto que puede afectar al resto de tareas pendientes.
  8. Los objetivos concretos ayudan a la hora de concretar tareas y metas.
  9. No cometas muchas distracciones en tareas que puedas realizar después.
  10. Saber decir NO a tareas que puedan desgastarnos es tan importante como saber delegar y compartir responsabilidades conjuntas.

Los flujos de trabajo

Otra de las claves para organizar el trabajo y ayudarnos con el estrés es el tratamiento de los flujos de trabajo. Es mejor afrontarlos como si fueran actividades distintas.

Recopilar todo lo que tenemos en nuestra mente sea o no importante nos va a ayudar para que, después, examinemos uno a uno todos los elementos que tenemos en nuestras manos para saber qué es lo que podemos hacer, cuál será el resultado de lo que hagamos y qué haremos después.

Y, tras esto, organizar los resultados por categorías. Con todo ello podremos tomar buenas decisiones que ayudarán a que nuestro estrés sea menor, además de sentirnos realizados y satisfechos.